¿Por qué la experiencia no sirve de nada?

Cada mes, mientras rebusco las noti¬cias sobre drogas de las que los me¬dios de comunicación informan, me asalta, con pequeñas variaciones, una misma pregunta: ¿Por qué a las socie¬dades les cuesta tanto aprender de la experiencia ajena?

Por poner un ejemplo, podemos leer que en Estados Unidos se plantean la posibilidad de permitir la adquisición libre de jeringuillas, hasta ahora restrin¬gida para evitar su uso para inyectarse drogas. Las reacciones son las espera¬das: Unos se niegan en redondo vatici¬nando tragedias sin cuento si cualquie¬ra pudiera comprar jeringuillas y otros dan largas diciendo que tal vez, pero que de momento habría que realizar largos estudios y comparativas para estar seguros de no equivocarse. Fren¬te a éstos, quienes razonan a favor de la medida aducen los argumentos clá¬sicos del antiprohibicionismo: la prohi¬bición de su venta libre no afecta a los niveles de consumo, en tanto que trae consigo la consecuente conversión de las jeringuillas en un bien escaso que propicia su aprovechamiento colectivo y la propagación de enfermedades.

Pero lo curioso del caso es que estas reacciones son previsibles siempre y en cualquier circunstancia, sin que el hecho de que en otros lugares hayan pasado previamente por estos debates, o que desde hace tiempo estén supera¬dos, parezca influir ni poco ni mucho en las posiciones de unos y otros. Sí, por supuesto alguien propondrá estudiar los ejemplos de aquí o de allá y rehacerlos, pero casi siempre podremos observar tras este interés puras maniobras de di¬lación. Otro ejemplo clarísimo es el hecho de que en Amsterdam lleven con el cannabis legalizado "de facto" desde hace treinta años. Sería motivo suficien¬te para que cesaran las especulaciones teóricas sobre los incrementos de con¬sumo que traería la legalización o la desintegración social que profetizan nuestros prohibidores para las socieda¬des que dejen la decisión de consumir o no a cada individuo. Debería ser bas¬tante con comprobar los datos estadís¬ticos para desmontar también la teoría